CARRERA DE BOLA: El deporte autóctono mexicano con reconocimiento de la UNESCO

Es una manifestación ancestral representativa de los tarahumaras de
Chihuahua
La carrera de bola es un competencia que practican los tarahumaras o
rarámuris, en Chihuahua, desde tiempos ancestrales, originalmente
llamada “Rarajipuami”. En el año 2000, este deporte fue reconocido por
la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la
Ciencia y la Cultura) como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Para practicar este deporte se utiliza una pelota pequeña de madera,
llamada “comacali”, que se hace de encino, fresno, madroño o tascate. La
carrera puede ser uno contra uno, o en dos equipos, de hasta 20
integrantes, quienes lanzan la bola, con los pies descalzos y gana el
primero que logra hacerla cruzar la meta.
Las carreras se realizan atravesando valles, cañadas y cascadas. Pueden
durar desde algunas horas, hasta dos días.
Una característica especial es que es un deporte exclusivo para hombres.
La versión femenina es la “carrera de arihueta”, muy similar, pero en la
que, en lugar de una pelota, se lanza un aro, el cual persiguen las
corredoras, que lo atrapan y vuelven a lanzar, con la ayuda de una vara.
Desde 1995, la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE)
apoya la realización del Encuentro Nacional de Juegos y Deportes
Autóctonos y Tradicionales, con el objetivo de rescatar y fomentar la
práctica de estas disciplinas ancestrales, tesoro cultural y deportivo
de México.
En el evento nacional, convocado por la Federación Mexicana de Juegos y
Deportes Autóctonos y Tradicionales (FMJDAT), se presentan cada año
niños representantes de las comunidades tarahumaras, quienes muestran a
los asistentes cómo se practican estos juegos ancestrales.