Reflexiones de un Parroquiano
El absurdo orgullo de las remesas.
Arturo Ruiz
Recientemente, escuche y observe al
presidente Andrés Manuel López Obrador,
referirse con gran orgullo y hasta
satisfacción, respecto a las remesas de
dólares que envían a México, los paisanos
que trabajan en los Estados Unidos de
América.
Se le veía contento, satisfecho de ese nuevo
record de dinero que envían los paisanos a
sus familias en nuestro país.
Y es que les llamamos paisanos cuando envían
dinero o cuando regresan a sus tierras con
dólares y algunos hasta con un automóvil
chocolate, dólares, muebles y ropa que
ganaron con un gran esfuerzo y sacrificios
en una tierra extranjera, debido a que en
sus propias tierras, no encontraron empleos
suficientes ni bien remunerados.
El proceso de migración no es fácil, mucho
menos cuando los migrantes son
indocumentados.
De los millones de mexicanos que allá
radican, miles no lograron llegar: Murieron
en el intento, fueron detenidos o deportados
y en no pocas ocasiones privados de su
libertad por el crimen organizado para
trabajar en cultivos de drogas.
Algunos se han sumado a los miles de
desaparecidos que quizá un día sean
identificados, en alguna de las fosas
clandestinas que existen en el país.
Acá en la frontera norte de México, vemos a
miles de esos migrantes mexicanos, los vemos
como personas en penosos tránsitos,
refugiados en albergues, indigentes en los
parques y bajo los puentes.
Y muchos los ven hasta con molestia, son
ilegales, espaldas mojadas, son pollos, son
pobres huyendo de la miseria que le dan un
mal aspecto a las calles y parques de las
ciudades fronterizas.
Hay otros residentes de la frontera que
trabajan allá del otro lado, son los
antiguos rodinos, los Green Cards, que
duermen aquí en México pero que trabajan en
el field, en la construcción o en labores
domésticas del otro lado.
¿Por qué razón el gobierno mexicano se
siente orgulloso y presume el dinero
resultante del éxodo, de la migración y de
la desintegración familiar que ocasiona la
pobreza, el desempleo y la falta de
oportunidades en suelo nacional y que empuja
a esos millones de personas a vender su
fuerza de trabajo en el extranjero?
De acuerdo con datos de instituciones
bancarias y financieras nuestro país es
parte de las 10 naciones que concentran el
51 por ciento del total de las remesas.
México ocupó el tercer lugar mundial en
recepción de remesas en 2021 con 52,743
millones de dólares, solo detrás de China e
India, de acuerdo con un análisis de BBVA
Research.
¡Eso es motivo de orgullo o de vergüenza
nacional!
¿Habrá algún porcentaje de esas remesas que
provengan del dinero de actividades ilegales
asociadas a la venta de drogas en el
extranjero? ¿En qué embudo de la cadena
comercial, termina ese dinero enviado por
los paisanos a sus familias?
No sé a m i me siguen dando pena y dolor ver
a esas columnas de personas que hacen todo
lo posible, poniendo en riesgo su vida e
integridad personal con tal de cruzar la
línea internacional para obtener un empleo
pagado en dólares.
Y en relación a esa migración mexicana, no
pocas autoridades y representantes populares
se rasgan las vestiduras y exigen respeto a
sus derechos humanos, por parte de patrones
y autoridades norteamericanas.
Y sin embargo permiten el abuso, el
confinamiento ilegal y obstruyen el paso a
los migrantes del caribe y Centroamérica,
que al igual que los migrantes mexicanos
intentan llegar a tierra estadounidense para
ayudar a sus familias y para escapar de la
pobreza y la miseria.
La doble moral… el cinismo gubernamental y
el falso y absurdo orgullo que presume un
dinero que no solo no ha generado, sino que
es el resultado de su incapacidad para
ofrecer condiciones de empleo y vida digna
en suelo patrio.
¿De que se ríen los morenos? ¿Por qué se
parecen tanto estos nuevos gobiernos de
morena a los del prian? ¿Será porque son los
mismos solo que con camisa de color
distinto?
P.D.1. (Espero que los desmayos y desvaríos
de AMLO no sean algo grave y que tenga salud
y tiempo de abrir los ojos en los 3 años que
le restan a su gobierno para gobernar sin
odios, sin fobias y con altura de miras y
sin mas cateterismos)
P.D.2. (La petulancia de asumir que
llevarían a cabo una cuarta transformación
nacional se está yendo por el caño, al no
tener ni por asomo este gobierno la
envergadura {trascendencia se lee mejor} de
las transformaciones logradas por la
independencia, la reforma y la revolución
mexicana. De cuarta transformación se están
quedando en una simulación de cuarta)
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